gatos en los árboles: Lobi vs. insuficiencia renal.

miércoles, 23 de marzo de 2016

Lobi vs. insuficiencia renal.

Lobi es una gatiña de siete años que hace año y medio fue diagnosticada de insuficiencia renal, ahora sospechamos que pueda tener hipertiroidismo.

Cada mes realizamos diversas pruebas (analítica de sangre y orina, ecografía y esta vez T4) para controlar la evolución de la enfermedad.

La causa de la enfermedad renal en gatos debe ser diagnosticada  adecuadamente para evitar la progresión de ésta y en la medida de lo posible revertirla. Las técnicas de diagnóstico por imagen (ecografía abdominal, radiología, pielografías) deben realizarse de rutina en estos animales:

Anomalía familiar: PKD, Aplasia renal.
Metabólico: Hipercalcemia, Isquemia
Mecánico: Obstrucción crónica del tracto urinario (Hidronefrosis)
Neoplásico: Linfoma, Neoplasia primario
Infeccioso: PIF, Pielonefritis
Inmune: Amiloidosis, Glomerulonefritis
Toxico: Antibióticos (gentamicina, anfotericina B, AINES), Agentes de
contraste, metales pesados, hemoglobina, etilen glicol, Liliáceas
Progresión desde Daño renal agudo.

La Sociedad internacional de interés renal (IRIS/www.iris-kidney.com) ha propuesto un sistema de clasificación de la enfermedad renal en gatos que permite estadificar la fase en la que se encuentra el animal mediante la determinación de los valores de creatinina en un animal correctamente hidratado.


Siempre hay que interpretar la función renal junto con la densidad urinaria (medida en refractómetro y recogida antes de hidratar al animal). Así una pobre perfusión renal (deshidratación) provocará una azotemia prerenal con elevación de urea y creatinina pero la densidad urinaria renal se mantendrá dentro de valores normales (>1.040). Si se rehidrata la azotemia se resolverá. Sin embargo
si las causas de pobre perfusión renal son graves (hipotensión severa, shock hipovolémico, exceso diuréticos, shock cardiogénico) se producirá un Daño Renal Agudo por lo que el riñón perderá la capacidad de concentrar orina, situándose la densidad urinaria por debajo de 1.040.

Para determinar si se está ante un daño renal agudo o enfermedad renal crónica se deberá  hacer una buena historia clínica, valorar tamaño renal y utilizar técnicas de diagnóstico por imagen para llegar a un diagnóstico adecuado. Generalmente el gato con enfermedad renal crónica tiene un cuadro  de adelgazamiento progresivo, mientras que el gato con Daño renal agudo desarrolla sintomatología aguda.
Si bien en muchas ocasiones, los gatos tienen enfermedad renal aguda sobre crónica, debido a deshidratación, infecciones, intoxicaciones, obstrucciones ureterales...
En ellos, el diagnóstico de la causa de reagudización es vital.
Por tanto siempre hay que interpretar la función renal junto con la densidad urinaria y la historia clínica.

Tratamiento Dietético de la Enfermedad renal:

Según recientes estudios con un grado de evidencia I, el empleo de dietas  renales en animales con enfermedad renal crónica, resulta en una menor  mortalidad por uremia, comparado con la alimentación con dietas de mantenimiento. Las razones por las que las dietas renales son beneficiosas se deben a que son restringidas en proteínas y fósforo, tienen un mayor contenido en acidos grasos omega 3 y vitaminas, tienen un mayor contenido en potasio y son alcalinizantes.


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