lunes, 29 de febrero de 2016
maltratar un animal en españa es muy barato.
El sábado tarde acudíamos a la llamada de nuestras compañeras Proyecto Gato para intentar liberar a una gatita - de una cercana y comuna controlada - que por desgracia y sin quererlo, se había colado en el bajo de una casa con tan mala suerte que la dueña se negaba a liberarla y facilitarle alimento.
Ante casos así queremos expresar y denunciar públicamente:
1. La inexistente e incompleta legislaciòn que tenemos en este país en cuanto a maltrato animal se refiere. La policia, seprona...se limitaban a decir que sin una orden judicial no podían entrar.
¡Si fuera un niño ya estaría libre el primer día!
Sin embargo, esa gatita tuvo que estar encerrada 10 días sin comer y sin beber - y porque ayer, cansadas de ver que nadie hacía nada y ante la pasividad de las "fuerzas del orden" decidimos actuar por nuestra cuenta para salvarle la vida.
¿Qué es lo qué pretenden? ¿Qué se muera de hambre? " total sòlo es un gato"
2. La insensibilidad, falta de empatía y malas formas de algunos agentes de la autoridad que ante casos así optan por reírse, mofarse o ponerse altivos y prepotentes. Debería ser motivo de expediente disciplinario señores que se creen que son dioses y lejos de ayudar ofenden, no tenemos porque aguantar a personajillos que se creen que por ponerse un uniforme tienen derecho a humillar.
En cuanto a la gatita, después de romper la malla metálica que recubría la ventana, asomaba en busca de comida pero por miedo y desconfianza se volvía a meter. Ayer se quedaron sus cuidadoras de comuna vigilando a la espera de que saliese con la esperanza de la seguridad que da la noche a los felinos.
Ante un caso de maltrato animal debe actuar la ley de manera inmediata y no tener que enfrentarnos a multas los defensores de los animales por intentar salvarlos de una muerte segura.
¡YA BASTA!
Podéis leer PARTE de la noticia aquí.
lunes, 22 de febrero de 2016
¿Familias diferentes?
Muchas sabemos que no es necesario un mismo código genético o un certificado para apreciar a alguien como parte de nuestra familia. La familia son las personas que uno elige, ahí donde incluir tanto a animales o amigos. Porque no es necesaria la sangre para crear un vínculo, la unión auténtica la crea la lealtad y el afecto y no unos mismos apellidos en común.
Así que.. ¡Bienvenidxs a nuestras familias a esos seres maravillosos peludos, emplumados, de cuatro o dos patas que dan luz a nuestro corazón!
viernes, 5 de febrero de 2016
No a la venta de animales.
No hay nada más triste que una tienda de animales.
La idea de vender animales, cosificarlos y cuantificar sus vidas en función de un pvp siempre me pareció una idea horrorosa. En las protectoras los animales envejecen sin conocer nada más allá del cariño de los voluntarios que buscan tiempo de donde no tienen en un intento de otorgarle a esos supervivientes una pizca de la vida que desearían poder brindarles. Mientras tanto en la calle, los menos afortunados, sobreviven, malviven entre basura, entre los escombros de esta sociedad que pretende ocultar bajo una fachada pomposa un solar. En ese solar emocional se encuentran y penden demasiadas veces las vidas de animales que no saben por qué, pero allí están, a la espera, de como en este caso, algún humano se lucre a su costa.
No es difícil imaginar lo que supone para un animal vivir en un escaparate, en concreto, si hablamos de un centro comercial, el horror se dispara. En Coruña, en el centro comercial “Marineda city, se encuentra la tienda "Hobby Zoo”. Tienda que vende animales, tienda que trafica con vidas. Como podéis ver en las fotos, los animales que allí están expuestos al capricho de turno, están en unas condiciones miserables. ¿Pero a quién le importa?
Pues a nosotras nos importa para intentar que un pataleo devenga en ley de protección animal y esos pobres indefensos dejen de sufrir la ignorancia que los ha llevado allí.
Bultos, pelo muerto, sin vida, animales sin apenas poder moverse,heridas en los ojos, son síntomas tangibles a la vista de alguien que tenga un mínimo de sensibilidad. El problema son los otros síntomas, los que no vemos, los que van por dentro, hablo del freno a la búsqueda de estímulos, del desajuste en el metabolismo y psique de esos esclavos. ¿Pero a quién le importa si la vida de un hámster cuesta 7€? Si una cobaya con su jaula cuesta 40€? Porque claro, imaginad lo que podría suponer para los responsables de semejante atrocidad, llamar a un veterinario para curar esos bultos. Desde luego si el PVP es de 7€, ¿cuánto les costará a ellos esa vida? 3, 4€?? Imagino que será más fácil retirarlos del escaparate cuando las luces se apagan y amanecer con un nuevo esclavo de nuevo expuesto al capricho de algún niño que probablemente no tenga la culpa de tener unos padres que no le hayan explicado que una tienda de animales es un infierno.
Desde Gatos en los árboles manifestamos nuestro dolor ante semejante atrocidad, no hay sangre, no hay gritos... pero a nosotras nos parece de las escenas más gores que hayamos presenciado, animales agonizando sin saber que hacer mientras familias con niños a la cabeza se ríen y dan golpecitos en el cristal para que el hamster, la chinchilla o el perrito de turno se de la vuelta y les devuelva una mirada de auxilio, de tristeza infinita.
Hobby zoo es tan sólo un ejemplo de lo que ocurre en las tiendas de animales de manera habitual, los animales son tratados como cosas como algo y no como alguien.
Queremos animar a todas esas personas que si sois testigos de casos como estos pongáis una queja y llaméis a la policia de vuestra localidad para que tome nota y quede constancia. No podemos ser cómplices de tal atrocidad, no podemos normalizar este tipo de cosas.
¿cómo es posible permanecer frío como un témpano ante el derrumbe tan visible de una vida que querría simplemente eso, vivir.?
Porque todos los animales importan.
DI NO A LA VENTA DE ANIMALES.
lunes, 1 de febrero de 2016
crema de zanahoria y coco.
Un puñado de Zanahorias (unas 6 ó 7)
½ Cebolla Grande
2 Patatas medianas
Un chorro de aceite de oliva
1 Vaso de leche de coco
Jenjibre
Perejil
Sal
En una tartera vertimos el aceite hasta que cubra la superficie, cortamos la cebolla en juliana y la doramos. Cuando veamos que empieza a ponerse transparente echamos las zanahorias que previamente habremos cortado en rodajitas. Dejamos que se haga un poco la zanahoria y añadimos las patatas cortadas en cuartos. Cubrimos con agua, añadimos sal al gusto y una cucharadita de jengibre. Cubrimos con agua y dejamos cocer hasta que la zanahoria y patatas estén blandas. Antes de batir añadimos el vaso de leche de coco, et voilá!!
Como nos pilló el antojo en domingo no teníamos ni sésamo ni pipas de calabaza para decorar, así que usamos perejil aunque también podríais usar cilantro si quieres añadir un sabor nuevo : )
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